Polpo, ubicado en el Pasaje El Parián, es un bar gastronómico que combina elementos tradicionales y contemporáneos. Diseñado por Sofía Betancur, el proyecto respetó la estructura original del pasaje, construido en 1926, adaptando su arquitectura a un espacio moderno. Las columnas preexistentes dividen el lugar en cuatro secciones, aprovechándose para darles identidad propia. En el centro se encuentra una barra en forma de U que rodea la cocina abierta, mientras que las barras de pie de terrazo claret y las mesas de madera tzalam aportan calidez.

La construcción integró materiales como mármol Santo Tomás, concreto prefabricado y cobre, que junto con la iluminación tenue, mantienen la estética industrial del edificio. Prefabricados de concreto y terrazo se utilizaron en las paredes y barras, mientras que la vitrina principal, diseñada en herrería con integración de vidrio, refuerza la modernidad del espacio sin perder su esencia histórica.